MASONAS Historia de la masonería femenina

Yolanda Alba
Ed. Almuzara 2014


Yolanda Alba fue ambiciosa al escribir su libro o quizás no encontró el
título adecuado a su obra. Pretender que toda la historia de la
masonería femenina cupiese en poco más de doscientas páginas es,
cuanto menos, muy arriesgado. Sin embargo, la estructura de su trabajo
ofrece una perspectiva bien enfocada.
El trabajo y la participación de la mujer en todos los ámbitos, aunque
existiese, ha sido silenciado hasta hace bien poco y en el terreno de la
masonería, tanto operativa como especulativa, ha ocurrido lo mismo.
Las mujeres en general, y las masonas en particular, luchamos contra
ese olvido social. La autora nos lo recuerda desde las primeras páginas
de su libro y expresa su voluntad específica de reconocer con su trabajo
el esfuerzo de las mujeres masonas por alzar la voz.
Después de situar someramente algunos conceptos básicos de la
masonería, trata de las mujeres en las construcciones medievales y del
personaje esencial que fue Sabine von Steinbach. Continúa con la
Masonería del siglo XVIII, las denominadas “Salonnières”, la masonería
de adopción del siglo XIX, las insurgentes mejicanas y las mujeres que
tomaron parte en la Revolución Francesa.
Llegadas a este punto del libro ya habremos visto que abarca un amplio
periodo histórico y que mucha información se queda en el tintero, pero
lo que sí afronta no deja por ello de ser correcto e interesante. A partir
de aquí analiza la figura de algunas masonas destacadas del s. XIX y
dedica sus páginas centrales a las masonas españolas de ese mismo
siglo y del siguiente con una corta referencia a las portuguesas y las
masonas inglesas y americanas, para pasar después a la masonería
femenina soberana o independiente de la actualidad.

De este modo nos va conduciendo hacia unos planteamientos con los
que intenta reflexionar sobre el futuro, los motivos de una masonería
femenina y otros temas candentes de la actualidad, como la
homosexualidad o el transgénero.
Es un libro arriesgado y ambicioso en su concepción, no se le puede
considerar una obra de investigación en sentido estricto, no es un
diccionario de personajes, pero vale la pena tenerlo en cuenta. Bien
estructurado, no es necesario leerlo de forma continuada porque no es
una novela, pero abre puertas a la reflexión, aunque a alguien pueda
darle la sensación de que, al querer abarcar tanto, se queda algo corta.

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